El roble es un árbol ornamental de hoja perenne que puede llegar a crecer hasta los 40 metros de altura. Sus hojas son alternas de un tamaño de 4 a 8 cm. El fruto que produce es la bellota de color amarillo-verdoso. El fruto madura en verano y se recoge durante el otoño. La etapa de floración de este árbol se produce a principios de primavera. Y en el mes de mayo, se puede observar la floración completa.

El roble requiere unas precipitaciones anuales de 600 a 1.000 litros anuales. Pero, hay que tener cuidado de que el terreno no se encharque, ni se inunde. Este ornamental no tolera los veranos demasiado secos y con poca humedad en el ambiente.

Roble

El roble requiere una ubicación soleada. Pero, hay que tener en cuenta que este árbol sufre con temperaturas superiores a los 25ºC.  Cuando la planta es joven le puede venir bien algo de sombra. Este ornamental es resistente al frío, ya que es capaz de soportar hasta -15ºC. La temperatura ideal para esta variedad sería la comprendida entre 18 y 20ºC.

El roble se debe plantar en otoño. No debe podarse más de lo necesario. Simplemente nos limitaremos a eliminar ramas en mal estado o enfermas.